lunes, 24 de junio de 2013

Hacia el Cyberpunk (II)


El año pasado, la Editorial Sexto Piso publicó, en castellano, la obra del sociólogo y crítico cultural Morris Berman Las raíces del fracaso americano, sobre la que Juan Francisco Ferré escribe, el 11 de septiembre de 2012: “tampoco puede haber futuro si este se funda, como hasta ahora, en el progreso tecnológico incontrolado y la economía más inicua y desaprensiva. Esta imposibilidad del futuro estaba inscrita desde su nacimiento en el genoma nacional por un ideario mercantil y comercial que, según Berman, no solo ha consumido sus recursos sino que ha comenzado a devorarse a sí mismo y se encamina ya hacia su autodestrucción, como escenifica el final de Moby Dick (“una estremecedora descripción metafórica”, opina Berman, “de la historia americana”). Con precisión clínica, Berman habla de un país donde los poderes públicos no se ponen de acuerdo para reconstruir los diques de Nueva Orleans tras la devastación del huracán Katrina por temor a incurrir en cooperativismo socialista, donde la guerra es otra forma de hacer negocio, como ha pasado en Irak, donde el cien por cien de los americanos ve vigiladas a diario por agencias estatales sus comunicaciones electrónicas o telefónicas, donde los mismos (la banca y las corporaciones financieras) que en nombre del neoliberalismo hundieron la economía del país y, de paso, de todos sus socios internacionales mantienen sus puestos o son encumbrados a consejeros del presidente, donde una mafia política de profesionales del derecho y la economía somete la maquinaria estatal a sus intereses, con la ayuda del ejército y la policía, donde cualquier ciudadano puede perder en cuestión de horas todos sus derechos civiles, etc. Esta América en bancarrota parecería extraída de una distopía de ciencia ficción y, sin embargo, es tan real como el dominio mundial de la cultura de masas estadounidense y la mitología banal con que fascina la imaginación de sus súbditos inconscientes.”
A finales de septiembre de 2012, “La UE plantea implantar el botón antiterrorista en el navegador. Entre las opciones para controlar el uso ilícito de Internet, Europa pretende que las redes sociales solo admitan identidades y fotografías reales.” Un paso más en el control del espacio virtual, que en EEUU, por lo que sabemos según las últimas informaciones (ante las que los socios europeos tanto se han escandalizado estos días), se viene practicando desde hace ya tiempo con la connivencia de los grandes grupos tecnológicos mundiales, como Google o Facebook.
¿Es esta Sociedad Marketing un espacio tecnocráticamente controlado? ¿Nos plantearemos alternativas a estos monopolios tecnológicos que colaboran con el control y el espionaje? ¿”Internets” paralelas clandestinas, proscritas y perseguidas por los Estados?
Si ya sabemos que las empresas utilizan las redes sociales para valorar la personalidad de sus empleados y tomar decisiones de acuerdo con el perfil personal que prefieren, obligándonos a todos a convertirnos cada vez más en Marcas Individuales que compiten por los pocos empleos residuales que van surgiendo, ¿a qué grado de construcción virtual de la propia identidad llegaríamos si, además, tuviésemos que tener en cuenta la valoración que de nuestros perfiles hiciese el aparato tecnocrático-político existente en cada momento?
¿Cuánto tiempo pasará hasta que los especialistas en Recursos Humanos de empresas y los servicios de información institucional estructuren parte de sus herramientas de conocimiento y adquisición de información en función del análisis de lo que ocultamos tras las Marcas Personales que nos fabriquemos para el universo virtual? ¿Cómo harán para levantar el velo digital tras el que cada vez más nos ocultaremos?
A mediados de octubre, el gobierno anuncia que quiere prohibir la grabación y difusión a través de Internet de las actuaciones policiales con la intención de “proteger a los cuerpos de seguridad del estado”. Teoría y práctica de la impunidad. Y esto, a la vez que se habla de tramitar una Ley de Transparencia, supongo que para legalizar lo que quieren que quede en la sombra. Pero ¿por qué, a la vez que, tanto en otros países como en España, se ahonda en una radicalización de los espacios expuestos al examen público, que en el caso de los representantes políticos y de los asuntos públicos es del todo necesario, pero que nos lleva a los individuos a una clara pérdida de intimidad y privacidad, por qué, repito, a la vez que se ahonda en este camino, se consolidan e intensifican otros ámbitos de oscuridad progresivamente sustraídos al control ciudadano? A finales del siglo I a.c., Augusto realiza una reforma tan profunda de la estructura política romana que acaba vaciando de competencias el Senado, pero no lo suprime: formalmente Roma seguía pareciendo una república. ¿Qué relevancia tiene que controlemos hasta el último euro de unos políticos que sólo nominalmente forman parte del aparato de gobierno? 
En noviembre Iberia presenta un ERE con el que pretende despedir a cerca de un cuarto de su plantilla. Las críticas se centran en la dependencia de Iberia de las estrategias de Britihs Airways, que no hace otra cosa que defender los intereses británicos. Pocos se plantean las preguntas clave: teniendo en cuenta la progresiva reducción de las reservas de petróleo, el encarecimiento del combustible disponible, la hasta ahora falta de alternativas viables para el combustible del tráfico aéreo y la violenta reducción de la economía mundial y el consumo, ¿son necesarios tantos aviones y tantos vuelos? ¿Da el mercado para que tantas compañías compitan? ¿No será que caminamos hacia un sistema de oligopolios?
Cada día las obras de J. Rifkin, en especial El fin del trabajo, se leen con más atención.
En diciembre, Hollande lanza un plan de choque contra la pobreza. Entre las medidas, aumentará un 10% en 5 años el subsidio social, para que pase de los 475€ actuales a unos 550€. La prensa socialista de toda Europa aplaude la medida. Otra política es posible y un largo etc. de estupideces. En el fondo, se trata de un plan de control de estallidos sociales. Puede que el papel futuro de las estructuras públicas se reduzca a esto: subsidios y una sanidad y educación de mínimos con los que mantener un cierto grado de paz social. Masas ingentes de población subsistiendo con estas misérrimas aportaciones del estado completadas con eventuales minijobs, de tal manera que esta mínima dependencia evite revueltas masivas.
Comienzan a tomarse medidas para superar las libertades individuales por medio de las responsabilidades compartidas y expandidas: con el ánimo de ahondar en una política que nos convierte a todos en trabajadores no remunerados de empresas privadas, se plantea extender la sanción a toda una comunidad de vecinos cuando se registren en los contenedores de la basura residuos no distribuidos adecuadamente para su posterior reciclaje. Es decir, si uno de los vecinos no hace el reparto de su basura conforme a los criterios de reciclaje, la sanción será impuesta a toda la comunidad de propietarios. Medida que, además, nuestro ilustre Tribunal Supremo, en estos días de junio, ha tenido a bien avalar, en un alarde de colaboracionismo con esta deriva de extinción de lo individual.
Para terminar el año, la UE acordó crear un supervisor bancario único, que entrará en funcionamiento en 2014, siguiendo la línea de un modelo tecnocrático en el que instituciones fuera del control ciudadano construyen estructuras de poder que habrán de regir las vidas de esos mismos ciudadanos.

8 comentarios:

  1. Creo que se pretende un control de lo que ocurre en internet que es imposible, que incluso va contra la naturaleza de la red. Es cierto que en internet se comenten delitos y deben ser perseguidos, pero de ahí a tratar de controlar todo lo que se publica va un mundo. Pero no sólo desde el punto de vista de los gobiernos (poniendo como ejemplo las redes sociales, pretender equiparar una convocatoria de manifestación en Facebook a un acto terrorista en mi opinión roza el absurdo), sino también de los usuarios de a pie, siguiendo con el mismo ejemplo, exigir la total privacidad de lo que se publica en el perfil de Facebook es de una conmovedora ingenuidad. Y es más, ni siquiera Facebook puede tener total control (permitir perfiles sólo reales? exactamente qué es real en un mundo llamado virtual?).
    Sobre el tema de los oligopolios....no sé si nos dirigimos hacia ese modelo, pero parece que la libre competencia es una más de las facetas del capitalismo que se desmoronan. El libre mercado no a llevado a la lucha por la demanda, sino a los pactos ocultos.
    Y ya sé que este último punto que voy a comentar del post es algo meramente anecdótico en él, pero me resisto a dejarlo sin comentar, lo del "progreso tecnológico incontrolado" como fuente de nuestros males me ha llegado al alma, porque me resulta extraño leer esa frase cuando yo más bien siento que el progreso tecnológico de las últimas décadas deja mucho que desear, es lento y poco innovador. Se limita casi a exprimir las últimas gotas de tecnologías que en muchos casos fueron desarrolladas durante la Segunda Guerra Mundial, en multitud de campos los avances son tan escasos que es sencillamente desolador. Y si amplío el abanico a la ciencia en general la cosa no pinta mucho mejor cuando veo como en campos como la Medicina se atisban puertas que "esos que controlan" no permiten abrir....

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    1. Dios, qué dolor de ojos!!! Me he comido una "h". :(

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  2. Realmente crees que el control de Internet es imposible? Piensa que todo lo que se hace en la red deja un rastro en principio fácilmente reconocible. Las empresas de hecho utilizan esos rastros para su labor de marketing; es una pieza angular: definir procedencia de los usuarios, tiempos de permanencia, tráfico total, rutas, etc. Escribes un meil y puedes ver publicidad automáticamente asociada por contenido. Toda actividad en Redes Sociales es inmediatamente utilizada para programar campañas publicitarias. De hecho ésta es la tendencia para hacer rentable cualquier red, de Facebook a Instagram... La única dificultad es que la cantidad de datos es inmensa..., pero aún así, cada vez es más fácil procesarla...

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  3. Mmmmmm....a ver que me centre un poquito, que se me mezclan las ideas.
    Cuando utilizas una aplicación que te provee una empresa privada con ánimo de lucro, mal vas si piensas que realmente es gratis. Pagas con la información que proporcionas; información sobre tus gustos, tus hábitos, tus ideas, las de tus contactos...eso es lo que tú das cuando usas facebook, gmail o buscas en google. Eso está claro, pero no hay que olvidar que eres tú el que libremente decide usar esa aplicación sin contraprestación económica, y el que escribe correos y comparte fotos, ellos te dan un documento con las condiciones de uso, y tú lo aceptas, allá tú si lo has leído antes o no.
    Esto genera una cantidad de información ingente, pero como tú dices, eso cada vez es menos problemático, la minería de datos y la capacidad de procesado han avanzado mucho en los últimos tiempos.
    Y esto por un lado, en el uso "blanco" de internet.
    En el lado oscuro creo que el control es muy muy difícil. Como bien dices cualquier acción en internet deja un rastro claro, equivalente a la grabación que podrías tener de un paseo si en cada esquina del mundo hubiera una cámara.....pero resulta que ese rastro, al final, no es más que una colección de 1s y 0s escritos en algún sitio....y en internet para borrar el pasado solo necesitas pasar por los mismos sitios y escribir a tu conveniencia...¿eso es fácil?, no, para nada, ahora bien, ¿es imposible?, ni muchísimo menos, y apostaría a que hay más gente de la que imaginamos que sabe hacerlo. Pero no creo que sea necesario llegar a esos niveles de hackeo para escapar del control....¿sería posible localizar a una persona que manda un correo (por ejemplo) desde una cuenta de correo para la que ha dado datos falsos y accede a internet con un ordenador que no ha usado antes desde un sitio con wifi pública?
    Así que en resumen, creo que el control de internet como herramienta de marketing es posible y eficaz, pero no como herramienta para la seguridad en un futuro cyberpunk.

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  4. Y cómo es que separas marketing de control?
    En una situación en la que el papel de los organismos públicos pasa a ser desempañado por corporaciones privadas, cómo diferenciar lo uno de lo otro?
    Y quién controla esos lugares virtuales en los que los 0s y 1s quedan almacenados?
    Y cómo borrar lo ya utilizado? Es decir, si mi rastro ya ha sido utilizado para marketing antes de que yo borre ese rastro (en el más que hipotético supuesto de que supiese hacer tal cosa), cómo hago para borrar ese uso que, indirectamente, registra mi paso por ese lugar?
    Sin entrar en cuestiones tales como el grado de conocimiento que hay que tener para diseñar estrategias que oculten tu identidad y seas difícilmente rastreable o en hipótesis relativas a las herramientas que estén a disposición de esas mismas corporaciones para desvelar la identidad oculta detrás de la virtual (conocemos realmente la capacidad de que disponen para controlar? Por ejemplo: hasta dónde alcanza "Prisma"?)
    Dices además que eres tú el que escoge usar esas plataformas gratuitas, pero hay alternativa? La alternativa a Google es otra empresa por el estilo, lo mismo que Facebook o gmail... La única alternativa es no usar Internet, es decir, aceptar que vas a vivir al otro lado de la brecha tecnológica, no?

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  5. Quizá no me expliqué bien, la diferencia que yo hacía era entre marketing y control de la seguridad en lo referente a la delincuencia.
    Y estoy de acuerdo, cuando tu rastro se ha usado para temas de marketing no hay nada que borrar...
    Creo que plataformas como Prisma no tienen objetivos de marketing, sino de control de la población para seguridad nacional (jeje, bueno, seguridad nacional, ya sabes....entre otras cosas para proteger al "sistema" de sus propios súbditos) Pero creo que no pueden funcionar muy bien, para mí es como poner una cámara con reconocimiento facial en las calles más importantes de cada ciudad, sabrás si fulanito iba tal o cual día por esa calle con o sin bolsas, solo o acompañado, incluso si estaba triste o alegre....pero no te servirá de nada, el individuo que te interesa, en el mejor de los casos pasará por esa calle con pasamontañas (adiós reconocimiento facial), o lo que es más probable, no pasará por delante de la cámara. Así que en conclusión, sistemas como Prisma violan nuestra privacidad para nada. Y hablando de temas de privacidad, qué me dices del potencial que tienen las Google Glass?
    Sobre el uso de unas u otras plataformas, ¡claro que existen alternativas!. Existen opciones para casi todo dentro del mundo del software libre: buscadores que priman preservar tu intimidad, herramientas para ocultar tu IP (y no dejar rastros, al menos no tan claros), servidores de correo y de chat que cifran los mensajes, herramientas para controlar el tráfico que accede a tu máquina....


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  6. Google glass me recuerda a Minority Report... entraremos en los locales y nos reconocerán y reconoceremos a todo el mundo (más control? Lo relacionamos con lo que decías de llevar un máscara? Será como llevar nuestro DNI en la frente?)
    El softweare libre me plantea las mismas dudas... Quizás la cuestión es que hay que empezar a desterrar esa diferencia que hacemos entre lo privado y lo público. A mí ya no me preocupa tanto el control de los estados como el de las corporaciones privadas... las grandes ya sabemos cómo funcionan, pero quién nos garantiza que los fabricantes de ese soft alternativo no disponen de mecanismos ocultos que derivan en igual control...
    Nuestro grado de exposición y dependencia es tan grande que, una vez que entras en la red, por mucho que hagas, si no fabricas tus propias herramientas, difícilmente puedes sustraerte...
    La única alternativa es, claro, no participar...

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  7. Sí, a mí también me recuerdan mucho a Minority Report, y también mucho al capítulo "Tu historia completa" de la serie Black Mirror (http://es.wikipedia.org/wiki/Black_Mirror_(serie_de_televisi%C3%B3n)).

    En el software libre (ese software alternativo) los mecanismos ocultos no tienen mucho sentido, puesto que dispones del código, por lo tanto, si dudas, podrías depurarlo, compilarlo y crear tu propio ejecutable....

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